jueves, 4 de septiembre de 2008

capricho pasajero...


leí una declaración de amor disfrazada de sincera amistad y mis ojos se volvieron vidriosos...

esta vez no era de alegría...

es una sensación que me acompaña los últimos días...



Una necesidad de querer el apoyo más egoísta que existe, volver a rozar con las yemas de los dedos extendidos esa simpleza de felicidad reconfortante... con la que te quedas dormida plácidamente y despiertas con una sonrisa rebosante en la cara...


Apoyo condicional de y para tí solamente... y por el tiempo máximo que seamos capaces de alargarlo y deslizarnos por él, de la mano...o sin ella, mejor cerquita, para vernos, acariciarnos... pero no para pertenecernos...


Capricho pasajero...